Edificios sostenibles: el futuro de la arquitectura y el urbanismo

En pleno siglo XXI estamos sufriendo las dramáticas consecuencias del cambio climático.

Los veranos cada vez más calurosos y los terribles huracanes que afectan a numerosos lugares del planeta son un claro ejemplo de como la mano del hombre ha sido tremendamente dañina. Afortunadamente parece que cada vez estamos tomando una mayor conciencia del triste panorama y el ser humano está empezando a llevar a cabo medidas para arreglar la situación.

De acuerdo con la Unión Europea el 40% del consumo de energía proviene de edificios. Esta tasa podría llegar al 50% en países cuya tasa de industrialización es baja pero cuentan con un gran número de edificios. Los edificios son grandes consumidores de energía global y por ello es importante que tengamos este dato en cuenta para intentar reparar el daño ocasionado.

Ante las consecuencias que el cambio climático ha traído al medio ambiente, la arquitectura sostenible está actualmente en pleno auge. Cada vez estamos más convencidos de la necesidad de construir edificios sostenibles en armonía con el ecosistema, empleando materiales naturales y haciendo un correcto uso de ellos, sin menoscabarlos ni desperdiciarlos.

Edificios que se autoabastecen, que se construyen con materiales reciclados, que reutilizan el agua… Los nombres que reciben estas construcciones son muy diversos: sostenibles, eco, de energía cero, eficientes, etc. Por eso hoy te presentamos los edificios sostenibles que han abierto una vía verde para el futuro de la arquitectura y el urbanismo.

 

El máximo objetivo es el ahorro energético

El término “arquitectura sustentable” se empleó por primera vez en el año 1987 en una sesión de las Naciones Unidas. Los edificios autosostenibles se construyen con materiales que se puedan reciclar y por lo tanto poder emplear en futuras ocasiones.

La máxima fundamental de estos edificios es conseguir un ahorro energético, lo que se va a traducir en un ahorro económico. Se va a intentar en todo momento que la energía empleada en el edificio se pueda volver a emplear de nuevo y así no cometer ningún desperdicio.

La luz solar será enormemente aprovechada al igual que la ventilación, aprovechando de esa forma los recursos naturales para conseguir una calidad de vida mejor. También es importante que este tipo de edificios sean armónicos con las características del espacio donde se construyan. Bajo ningún momento se deben llevar a cabo construcciones que lleguen a interferir con el paisaje que les rodea.

Se trata de emplear materiales que no son contaminantes y a la vez conseguir que se reduzca el consumo de agua y energía. Todos estos objetivos también se consiguen mediante el uso de la domótica.

 

¿Qué son los edificios sostenibles?

Las construcciones sostenibles generan un escaso o nulo impacto en la naturaleza. Su funcionamiento es cíclico, aprovechando las fuentes de energía alternativa y/o renovable, y son un modelo arquitectónico ambientalmente consciente.

 

 

 

Un edificio sostenible es una edificación que, por la forma y sistema de su construcción, puede mantener o mejorar la calidad del entorno en el que se encuentra. Ayudan a evitar el deterioro ambiental desde su cimentación, ya que, al prescindir de las emisiones de CO2, apenas causan impacto medioambiental. Su eficiencia también viene avalada por el uso de energías 100% renovables -solar y/o eólica-, lo que les permite ser autosuficientes.

 

Además, es fundamental que estos principios de sostenibilidad vengan avalados por el certificado LEED (Leadership in Energy and Environmental Design): el reconocimiento oficial de más alta exigencia, y aceptado a nivel internacional, que establece si una construcción merece la consideración de sostenible. Para esta calificación se solicitan, entre otros requisitos, que se trate de una instalación innovadora, la disminución del uso de agua, el rendimiento energético, la correcta conservación de materiales, el uso de material reciclado y el respeto y mantenimiento de la calidad del ambiente interior.

 

 

Las distintas calificaciones del certificado LEED, en función de la puntación obtenida, otorgadas por la Green Building Council

 

¿Edificios sostenibles, edificios ecológicos o edificios verdes?

La RAE define como “sostenible” todo lo que se equilibre con el entorno medioambiental de forma perdurable y autosuficiente. A menudo sucede que cuando hablamos de diseño, arquitectura o, en este caso, edificios sostenibles, tendemos a usar sinónimos como “ecológico” o “verde”. La realidad es que existen pequeños matices entre estos tipos de edificios y construcciones y que os explicamos a continuación.

Cuando hablamos sobre edificios ecológicos debemos tener en cuenta que en su construcción se emplearon recursos naturales que reducen el impacto en el ecosistema. Esto es lo que define como bioconstrucción o arquitectura bioclimática. Este tipo de diseños no sólo hacen uso de materiales naturales (madera, fibras vegetales, minerales, arcillas y/o piedras), sino que también respetan las condiciones del entorno y aprovechan la energía solar renovable o fotovoltaica.

Para que un edificio pueda ser considerado “edificio ecológico” debe de cumplir los requisitos solicitados por la certificación BREEAM (Building Research Establishment Environmental Assesment Methodology).

 

En general, un edificio ecológico es verde. Pero por el contrario, no todas las construcciones verdes son ecológicas ni se consideran edificios sostenibles. Los edificios verdes son construcciones en las que predominan los árboles, jardines, bosques y la vegetación en general tiene un papel protagonista. Estos edificios se caracterizan por estar ubicados en un entorno natural y, en muchos casos, se los denomina “muros verdes”.

 

En España, la RAE aún no ha especificado la definición de “edificio verde”. Esto provoca que suela confundirse este término con el de “edificio ecológico” y con “edificio sostenible”, siendo este último la definición de una tipología arquitectónica mucho más amplia y compleja.

Nanyang Technological University School of Art en Singapur

Los edificios sostenibles que debes conocer

El sector de la construcción es uno de los ámbitos más importantes de actuación para conseguir alcanzar los objetivos globales en la lucha contra el cambio climático. Según datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en 2050 casi el 68% de la humanidad vivirá en ciudades. Aunque esto apenas representará el 3 % de la superficie del planeta, supondrá un consumo del 78% de la energía y un 60 % de las emisiones de gases de efecto invernadero.

Se ha demostrado que los edificios sostenibles minimizarán este consumo energético y que jugarán un papel decisivo en esta lucha contra el cambio climático. Desde altísimos rascacielos a originales museos, cada vez son más los estudios de arquitectos que alumbran edificios sostenibles que se integran en el entorno de manera impecable. A continuación, te mostramos los 5 edificios sostenibles que no te dejarán indiferente.

 

Edificio One Angel en Manchester, el edificio más sostenible de Europa

Empezamos la lista fuerte, desvelándote cuál es el edificio más sostenible de nuestro continente. Si todavía no conoces la ciudad de los Beatles, tienes un motivo más para visitarla.

El edificio que basa su construcción en el método BREEMAN cuenta con un sistema para la obtención de calor y electricidad original y eficiente. Un sistema alimentado con aceite de semillas de uva que se obtienen de una granja comunitaria son las encargadas de generar la energía.

Pero no solo esto, uno de os edificios más sostenibles del mundo se ilumina con luces led y cuenta con un avanzado sistema de reciclaje de deshechos y agua procedente de la lluvia (algo muy útil en una ciudad como Manchester).

 

El edificio Ch2 en Melbourne es uno de los edificios más sostenibles del mundo

                             

Si eres uno de nuestros vecinos de Redondela, lamentamos comunicarte que no te pilla cerca uno de los edificios más sostenibles del mundo. Éste que te enseñamos está nada más y nada menos que en las antípodas de tu casa: Australia.

El Melbourne Council House, más conocido como el Ch2, es el primero que recibe la distinción de 6 estrellas en calidad medio ambiental.

¿Sus principales valores en cuanto a sostenibilidad? Su fachada está cubierta de madera reciclada con células fotovoltaicas y cuenta con 5 torres de agua que se encargan de regular la temperatura de la construcción. Es innovador su sistema de autorreciclaje de aguas contaminadas, muy útil para todos los usuarios del edificio.

 

Pearl River en Guangzhou, China

                     

China parece un país capaz de absolutamente todo, desde los peores niveles de contaminación, hasta contar con uno de los edificios más sostenibles del mundo. Y, efectivamente, no es un edificio discreto que a nadie llama la atención. El edificio Pearl River es un rascacielos.

El edificio de 300 metros de altura se pensó para transformar en energía gracias a elementos que lo rodean, bastante cotidianos pero efectivos. La construcción cuenta con suelo radiante, luces de bajo consumo y apuesta por la energía aerotérmica: turbinas gigantes que transforman el aire en energía.

 

Bullit Center en Seatle

 

Si los chinos son capaces de todo, los americanos siempre tienen que estar en todos los rankings de lo mejor y lo más grande. No iba a ser menos cuando hablamos de los edificios más sostenibles del mundo.

Es uno de los pocos edificios del mundo que tiene ‘esperanza de vida’. Sus diseñadores afirman que está hecho para durar unos 250 años. Está considerado el edificio comercial más sostenible del mundo, ya que su consumo de energías fósiles es ninguno.

No está enganchado al consumo de agua municipal, cuenta con enormes paneles solares y usa energía geotérmica para la calefacción en invierno.

 

 

 

 

 

 

 

 

Commerzbank en Frankfurt

El segundo edificio más alto de Europa es también uno de los más sostenibles del mundo. Ha conseguido reducir el consumo en un 50% comparado con otros edificios de sus características.

 

Museo del Mañana, Río de Janeiro (Brasil)

Este museo de ciencias está diseñado por el arquitecto español Santiago Calatrava. Construido junto al muelle de Pier Maua e inaugurado en 2015, el diseño se inspira en la cultura carioca. A través de su arquitectura y sus formas explora la relación entre la ciudad y el entorno natural.

       

El edificio cuenta con un diseño sostenible, la incorporación de la energía natural y fuentes de luz. El agua de la bahía se utiliza para regular la temperatura dentro del edificio a través de unos espejos de agua que envuelven el museo. También dispone de paneles solares fotovoltaicos que se pueden ajustar para optimizar el ángulo de los rayos del sol. Estos paneles también suministran energía solar a todo el edificio

El edificio cuenta con un diseño sostenible, la incorporación de la eneSituado en el muelle Mauá, el Museo del Mañana forma parte del proyecto de revitalización de Puerto Maravilla, la zona portuaria de Río de Janeiro. La idea de construir un museo en esta ubicación era permitir una mejor integración entre el Distrito de Puerto y el centro de la ciudad, ayudando así a hacer de esta zona uno de los barrios más atractivos de la ciudad.

 

Torre Reforma, Ciudad de México (México)

Erigido por el arquitecto Benjamín Romano de la firma LBR&A, es el tercer rascacielos más alto del país con 246 metros de altura. Situado en el Paseo de la Reforma de la capital mexicana, se inauguró en 2016 y fue seleccionado como el rascacielos más innovador del mundo con el Premio International Highrise Award 2018.

Debido a la alta actividad sísmica del país, está preparado para aguantar terremotos de hasta 9.0 grados en la escala de Richter. Utiliza energía solar y eólica, y el agua, además de reciclada, es utilizada para generar electricidad. El sistema de aire acondicionado está controlado por inteligencia artificial a través de sensores repartidos por el edificio que optimizan el uso de energía.

La Torre Reforma posee la certificación LEED Platino. Con casi un 25% de ahorro energético, consigue reducir las emisiones de dióxido de carbono en un 90% gracias a su sistema de aparcamiento robótico. Además, el exterior del edificio de hormigón y doble fachada de vidrio tiene un gran rendimiento energético con una reducción del 24% de acuerdo con la ASHRAE (American Society of Heating, Refrigerating and Air-Conditioning Engineer), permitiendo la iluminación natural en el 90% de los espacios interiores.

 

Biblioteca pública de Beitou, Taipei (Taiwán)
Inaugurada en 2006, está considerado uno de los edificios energéticamente más sostenibles del mundo. Ubicada en el Parque Beitou de Taipei esta biblioteca eco-sostenible está construida en madera. Fue el primer proyecto de Taiwan certificado como arquitectura verde gracias a su diseño sostenible que minimiza su impacto ambiental.

                                 

 

Diseñado por el arquitecto KuoYing-Chao, este edificio de tres pisos cuenta con grandes ventanales que ayudan a reducir el consumo de agua y electricidad. El techo está parcialmente cubierto con células fotovoltaicas para generar energía y además, debido a su ligera inclinación, recolecta el agua de lluvia para su uso en los baños.

El proyecto ha ganado numerosos premios, incluyendo el Premio de Arquitectura de Taiwán, así como el Premio a la Excelencia para la Construcción Ecológica de la Ciudad de Taipei y el Premio del Paisaje Urbano.

Turning Torso, Malmö (Suecia)

Otro proyecto de Santiago Calatrava, en esta ocasión ubicado en el lado sueco del estrecho de Öresund en la ciudad de Malmö, es el rascacielos Turning Torso inaugurado en 2005 con una altura de 190 metros. Es el edificio más alto de Escandinavia y en sus 54 plantas alberga oficinas y 147 apartamentos residenciales. Construido en acero, vidrio y hormigón armado y revestido con paneles de cristal y aluminio, está inspirado en la columna vertebral de un cuerpo humano retorciéndose en un movimiento ascendente.

El edificio se abastece con el 100% de energía renovable producida localmente. Además, cada vivienda puede gestionar el consumo de agua y calefacción, pudiendo regular su propio coste de energía y, por lo tanto, su impacto en el medio ambiente. Así mismo, en las cocinas de los apartamentos hay una unidad de eliminación de residuos orgánicos para producir biogás.

En agosto de 2015, Turning Torso -que ya se ha convertido un símbolo reconocible del skyline de la ciudad- recibió el premio 10 Year Award del Council on Tall Buildings and Urban Habitat.